Ya lo he dicho, a mi no me gusta el carnaval, no lo quiero, pero me lo tengo que comer cada año sí o sí, es lo que tiene ser madre, a no ser que quieras ser una antisocial, y quieras dejar a tus hijos marginados frente a tooooodos sus compañeros y que luego le señalen con el dedo, o que le cuenten lo bien que se lo pasaron disfrazados y él no, y entonces el niño te odie de por vida por haberle dejado sin vida social para el resto de sus días. Así que claudicas, es opcionalmente obligatorio que tus hijos tengan disfraz, y no sólo que lo tengan, sino que lo usen.
En el colegio de mi hijo, supongo que en otros también, y los que no, no me lo digais, que me moriré de la envidia... Tienen la costumbre de decirnos el tema sobre el que tienen que ir disfrazados los niños, así que, no sólo tenemos que disfrazarlos, sino que estamos condicionadas sobre qué disfrazarlos. En este caso el tema era la "pagesia", que en castellano viene a ser como ganadero, agricultor, profesión el campo. A bote pronto parece un tema de lo más sencillo, hay infinidad de opciones a nuestro alcance y el arte de crear disfraces, diseñados para que duren justo una hora, con bolsas de basura esta muy a la última, sólo hay que echarle un poco de imaginación... si la tienes...
Como he dicho, es un tema amplio, vaca, pollo, vaca, gallina, pato, ganso, rastrillo, zanahoria, tomate, pepino, berengena, fresas, uvas, espantapajaros, calçots (muy típico y característico de mi zona), incluso el propio "pagés", un sin fin de posibilidades... bien...
Así que las madres mañosas de las clases se ponen a pensar de que pueden ir nuestros churumbeles disfrazados, que quede bonito, que luzcan, y que lo podamos hacer con nuestras manos, que claro... es más barato y mucho más fácil... donde va a parar.... ¡Púes tampoco! Lo de barato me lo guardo porque por un euro mas o dos a lo sumo, les compro un disfraz en los chinos mas chulo que un ocho, y no tengo que dedicarle cien mil horas a la preparación, ni asistir a veinte reuniones de madres, donde se nos explica como hacer el disfraz (eso con suerte si es que hay reunión...). Como habréis supuesto yo tengo dos pies izquierdos donde se supone que debería haber una mano derecha, y la izquierda... mejor ni la nombremos... Mañosa, lo que se dice mañosa estoy en un menos veinte en el ranquing de las madres supermegamañosasquetecagasquebonitasoyyquebienlohago, y aparece mi frustración, ¿Qué hago?, ¿dejo que mis hijos sean unos parias de las fechas carnavalescas? ¿me voy a vivir al monte por una temporada? ¿les disfrazo de lo que me de la gana, siendo una revolucionaria, una antisistema?... No... Claudico y me sumo a todas las madres felices de poner en práctica todas sus dotes, de la que una, ya ha quedado claro, carece por completo.
En la clase de mi hijo mayor se decidió que irían de gallos y de gallinas, bueno... vale... no esta mal... Tenemos una madre que pinta genial y cose que te mueres, hizo el diseño, hizo reuniones y además, conociendome como me conoce, tuvo el inmenso detalle de hacer dos disfraces, el de su hijo y luego mientras hacía la explicación, uno para mi hijo, no sabéis lo agradecida que le estoy, ya que una cosa es coger una bolsa de basura y pegarle de algún modo trozos de cartulina recortados, y otra es coger tela y coserla, que por coser, yo no coso ni botones... bueno... los coso... pero no me hago responsable de como quedan.
Pero ¡oh! hete aquí, la clase de mi hijo pequeño fue toda una sorpresa, no había cosas para elegir no... tenía que ser un tractor... sí, sí... ¡¡un tractor!! me lo vendieron como que es super fácil, super barato, que se hace con nada... Dios mio... menos mal... llega a salirme caro y tengo que empeñar el anillo de casada y si llega a ser difícil lo mismo aún no he terminado... me hubiera salido mas barato comprarlo, de todas todas, entre la goma eva, darle el coñazo a otras madres para que una me consiguiera una caja, mi marido en el trabajo trozos de carton, otra amiga que tenia lo de dentro del rollo de cocina, la pistolita de silicona (con la que luego he sellado un cristal del salon... no hay mal que por bien no venga), las barritas de silicona, que mas que derretirlas para pegar, parece que se las come la cabrona, y todo el tiempo invertido, mio y de mi marido, cajas de zapatos mutiladas, quemaduras en las manos, precinto, porque al principio sin la pistola de silicona aquello no se pegaba ni con amenazas, que hasta el gato llevaba precinto en las patas y el otro en la cabeza, el sofa lleno de trocitos de goma eva de varios colores, vigilando que no se lo comieran, dudo que sea un alimento muy nutritivo para los mininos... y yo con mis dos pies izquierdos como manos... calculad...
Otra cosa no, pero cuando me pongo, le pongo empeño, y a pesar de la amputacion de un par de miembros para la finalización del tractor, el resultado fue decente...
Ahora no se que hacer con el disfraz... ronda por casa, ocupa su buen cacho de espacio. y con lo que me costó de hacer me da hasta rabia tirarlo... asi que lleva mas de un mes rondando por casa y sigue entero... como digo, cuando lo hago... ¡¡lo hago!!
Pero esta si que es la última, se que lo dije el año pasado y el anterior, pero este he decidido que es el último en el que me enredo... bueno... según cual sea el tema del año que viene... si es fácil... si los niños me lo piden... si... Bah, ¿a quién quiero engañar? el año que viene caeré de nuevo, me quejaré, pero lo haré, pero me tengo que hacer la dura....
Buaaaa... buaaaa....
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