martes, 13 de enero de 2015

Feliz Año con retraso

Buenos días, vengo a desear feliz año, aunque sea con retraso (y no me refiero a retraso de mente, si no de tiempo, que ronda una foto del Messi por internet de lo más divertida, pero no, no es el caso).

Las fiestas de Fin de Año nunca las pasamos en casa, pensaréis como mola, se va de fiesta que te cagas, de esas de ir con vestido largo de noche, peinada de peluquería, con tacones infernales, todo glamour y que cuesta un pastón. Púes ojalá jajajajaja, ese no es nuestro estilo, más bien es todo lo contrario.

Vamos a casa de los suegros, en este caso de los míos, no de los de mi marido, o lo que es lo mismo, a casa de SUS padres... He de decir que me encanta pasar allí Noche vieja, estaréis flipando, normalmente se quiere estar lo más lejos posible de la parte política de la familia, y aunque normalmente es así... esas fiestas son diferente. Es un pueblo perdido de la madre de Dios, donde ya sabéis que no saben ni colgar un cartel luminoso con las letras correctamente colocadas para felicitar las fiestas, (desde el cartelito de marras, cada vez que hay que felicitar en casa decimos: "Feilces Festus" y nos reímos como gilis jajajaja), son cuatro casas, tan pequeño que das dos pasos y parece que ya estas fuera, es mejor ir en círculos que en línea recta.

Allí el glamour brilla por su ausencia, y eso es lo que más mola, este año he tomado los cacahuetes (es que a mi las uvas... como que no me van mucho, siempre he creído que fue una putada que el excedente de ese año fueran uvas y no chocolate, o langostinos, o anisetes, o ferreros roche, en lugar de unas horrorosas uvas...) en chandal, sí, sí, en chandal, más ancha que una chancla, más a gusto que un arbusto, sin pasar frío, y sin destrozarme los pies subida en unos andamios de medio centímetro de ancho, maquillar un poquito (con mi chandal y tacones "arreglá" pero "informá"), para que no se me viera cara de muerta y bebiendo a dos manos. (Creo que ya lo he dicho, no bebo nunca, pero es de rigor pillarse un pedal esa noche, como no hay que coger el coche solo subir las escaleras para llegar a la cama, ni hay un alma en 20 kilómetros a la redonda que te pueda grabar haciendo el asno, para luego subirlo al youtube o a cualquier sitio, con la única intención de humillarte y reíse de ti hasta que consiga otro video peor en el que salgas, aprovechamos).

Como he dicho en chandal, un poco de rimel y color, y con cacahuetes, la elegancia no tiene cabida, pero cual fue mi sorpresa cuando tras la borrachera, toda la casa ya en silencio, todos dormidos, con la baba colgando, oigo por el hueco de la escalera la misma expresión que todos recordamos de una entrega de premios muy famosa, en el que ganó un director español:

-¡¡¡¡PEDROOOO!!!!!

Desperté sobresaltada, sin saber muy bien donde me encontraba, si me habían teletransportado a Los Angeles y estaba en primera fila de la entrega de la estatuita, maravillosa, dorada, llamada Oscar, viendo a la P. Cruz emocionada y gritando... El glamour había llegado a nuestras vidas "Oh my God"

Resulta que mi suegra en un alarde de intimidad y de pensar "Si yo no duermo, no duerme ni Dios", se puso a llamar a su marido, (ya habéis deducido que se llama Pedro, ¿el que le corregía las cartas que le escribía las faltas de ortografía? ese mismo, que creo que lo de hacerle bajar dos pisos a echar mas leña al fuego, en sentido literal, no figurado, que allí hay que echarle leña o te congelas más que en la película de Frozen, pillando unos catarros del quince, sales a la calle: menos diez grados, entras en la casa: más treinta grados, eso no hay cuerpo que lo aguante. Pero como decía, creo que es una venganza, hacerle bajar los dos pisos para seguidamente, gritarle por el hueco de la escalera, que suba corriendo de nuevo, no sabemos si también para echar más leña a otro fuego...).

Para el año que viene no se si llevarme un vestido de cola y un moño peluqueril, y así llevar ya conmigo el glamour, o unos tapones para evitar el glamour de los demás. Ya os contaré.

¿Os he dicho ya feliz año?

No hay comentarios:

Publicar un comentario