lunes, 11 de mayo de 2015

Mi gato no me habla

Buenos días, cuanto tiempo, he estado un poco liada, un poco desconectada, un poco con poco humor, valga la redundancia.

He estado tan liada que llevaba ya cinco centímetros de canas asomando a mi cabeza y el resto de pelo ostentaba ya un color cachumbo mas propio de un oso apaleado, que de una persona, así que me he decidido a ponerme el tinte, que lleva como tres meses en la estantería del baño esperando a que le haga caso, es lo que tiene ser pobre, que el tinte me lo pongo yo sola, que para cualquiera de vosotras, mujeres de mundo, apañadas, con dos manos como dos estrellas, maravillosas para cualquier arte a las que las pongaís a prueba, será coser y cantar, pero para una mujer que ha nacido con dos manos izquierdas se complica un poco la cosa.

No me quejo, esta vez no he tenido que limpiar todo el baño, techo incluiddo, que la última vez lo tuve que volver a pintar, no me pregunteis como hice llegar ahi el tinte, pero unas buenas gotas de negro azulado (que encima me lo pongo discreto), que tenia el techo... Ahora solo queda negro la pila de las manos, el espejo y como por precaución ya he quitado del medio cepillos del pelo, cepillos de dientes y cosas varias, también he conseguido salvarlas y mantenerlas en su color original, pero de limpiar el resto no me salva ni Dios.

Realmente cada vez que me tinto parece que me ha vomitado, o cagado un pitufo encima, los hombros (da igual que me ponga una toalla, ésta queda negra azulada, pero mis hombros también, los brazos ni digamos, y las manos, pondré la foto para que veáis que no miento, las manos, en plan estigmas, espero que se me quite... eso... o me hago uno igual en las costillas y en el empeine del pie, por aquello de que no me ha salvado ni Dios...

Después de haber embadurnado casi todo mi cuerpo de cintura para arriba y medio baño, me pongo una bolsa en la cabeza, porque? pues no lo se muy bien, lo he hecho siempre, y no una bolsa cualquiera, nooo, una de las diez céntimos del lidl, ya sabéis cuales quiero decir, las del mercadona seguro que traspasan y mancho el resto del piso... No me arriesgo. Arrebujo todo lo que soy capaz la bolsa y le pongo una pinza para sujetarlo lo mejor posible....

En estas aparece Tesla (para los nuevos, mi gato gris atigrado) y me mira con cara de pocos amigos mezclado con tu quien eres y que has hecho con mi "mami" que te muerdo y te araño como no me digas que es ese olor que sale de ti, mezclado con me das un miedo que te cagas no se si acercarme o salir huyendo. Todo eso en una sola mirada mientras me olfatea de lejos.

Ahora que ya no llevo la bolsa, que el pelo es del color deseado, (y mis manos... único sitio de donde no he sido capaz de quitarlo del todo), me sigue huyendo... No se si la solución esta en hacerme tintes mas a menudo o en no hacerme nunca mas otro... Pero al gato le va a dar un parraqué y yo llevo todo el rato con un ojo a mi espalda, por si le da por saltarme... que no las tengo todas conmigo...


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